El cumpleaños de la Abuela
Valeria Mejía
Ding.... Dong! Volvió a sonar el timbre de la casa de Doña Lilia, era otro montón de gente que llegaba a darle el abrazo de feliz cumpleaños.
Doña Lilia era una ancianita de ochentaitantos años que vivía solitaria en su casa, su única compañía era la señora de la limpieza que llegaba por la mañana a hacer los quehaceres diarios y un gato llamado Matías.
Matías salió corriendo encrespado a ocultarse bajo el sofá cuando vio que entre los invitados venía Carol, una niñita que en su afán de acariciar a los animales casi los asfixiaba.
La pobre doña Lilia no hallaba que hacer con tantos invitados, ni siquiera tenía pan y café para ofrecerles...
La verdad las fiestas y la bulla la ponían de mal humor. No comprendía cuál era el motivo de festejar que se estaba haciendo cada vez más vieja e inútil, se sentía marginada en su propia fiesta... y como era un poco sorda y no entendía los temas de la actualidad de los que se habla hoy en día; decidió que se retiraría a su alcoba; Pero no sin antes llevarse escondido entre su tapado un trozote de pastel de chocolate del que había traído una de sus hijas.
A doña Lilia se le hacía agua la boca! pero shhhhh nadie debía verla puesta que sabía que si la descubrían sus hijas Mónica y María se enfadarían con ella y no loa dejarían comer ni un bocado de pastel por la estúpida Diabetes que padecía.
Pero qué más daba?.... Hoy era su cumpleaños y comería lo que ella quisiera!
Se atiborro medio pastel hasta que quedo repleta, se sentó en su sofá, se sentía algo mareada y con mucha sed. Se quedo dormida... lentamente el shock Hiper-glicémico fue haciendo efecto y su sueño se volvió eterno.
Allí descanso en paz doña Lilia... mientras todos platicaban en el comedor, sólo Matías subió a su regazo
y lamió las migas de pastel.
Parecía que td@s se olvidadabn de ella, y no sólo en su cumpleaños. Ese olvido, esa falta de atención contribuyó también a su muerte.
ResponderEliminarExacto!
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