Estoy como custodio revestido de bronce con adornos. Permanezco cada día y noche, exhibiendo colochos barrocos en cada esquina de mi rectángulo tenebroso. Sostengo toda la podredumbre que podría de repente escapar de la angosta abertura. Aunque las letras que tengo tatuadas en mi superficie se encuentren grabadas en letra de mano, en estilo caligráfico “Celeste de Espada” , guardo los secretos oscuros y claros del pasado. El tiempo pasa en mi, en estaciones, en cortejos, en visitas los primeros de noviembre en donde se lustra mi superficie quedando brillante año con año.
Soy un testigo incuestionable del dolor de la despedida, la sonrisa mórbida del adversario que presencia a su enemigo bajar a su aposento eterno, o de la doliente amante que reposa su ofrenda al que secretamente amo a espaldas de su viuda, con su conocimiento o sin él .
Escucho, a veces, el lamento de mi prisionero, tratando de enmendar los errores cometidos, las decisiones mal tomadas, los besos no dados, las oportunidades omitidas, y sonrió: Este lugar es el menos indicado para arrepentirse.
Conozco el final del tramo, el valor de la despedida, el sentido de la palabra no dicha en su tiempo, y de la lágrima que nunca salió de los ojos. Me vuelvo parte de la profecía del “ Polvo eres” y en las noches miro huir esas partículas de la soledad del cementerio.
Me sé de memoria el rito final de los albañiles que de forma tediosa, monótona, inoportuna y dolorosa, tiran la mezcla con sus rusticas palas en las tumbas, y como matan su indiferencia con los octavos y las bolsas de pegamento que consumen, cabal, atrás de la tumba que vigilo.
La igualdad permanece aquí, como una neblina presente, constante, recordatorio absoluto que las clases sociales no existen entre muertos y almas .
-Acércate, lentamente, acércate, para ver si en mi frente no esta inscrito tu nombre.-
Me gustó muchísimo, muy bueno, muy bien descrito; de los mejores tuyos. Felicitaciones
ResponderEliminarTodo el cuento te toma, te hace imaginar el cementerio y al final, ¡muy buen final!, me sorprendió.
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