variopinto

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SIN TIEMPO PREMEDITADO

Sin tiempo premeditado.
Por Daniela Sánchez

El tiempo, transcurre... Los días pasan, ahora mismo una brisa suave cae, los árboles están verdes, con hojas tiernas recién nacidas, las mañanas son cálidas y las noches un tanto frías.

En la piel de ella viven sensaciones conocidas de tactos que una vez la desearon. Por momentos piensa que a pesar del tiempo transcurrido, de todo lo ha dejado en pausa, la vida le tiene deparado mucho sentimiento. Aunque algunas veces ella trate de contenerse, para no irrumpir en la vida de los demás, le cuesta... Y deja de tener nubes en la cabeza y recuerda los momentos compartidos, las palabras dichas, las risas cómplices y los silencios precisos.

Ella siente que lo conoce, su forma de ser, a veces de pensar... El quizás la conoce de siempre, ese conocimiento tácito que no requiere nada... En la cercanía y en la distancia. Y eso para ella es inmenso, eso le vale a ella más que todas las palabras no dichas.

Y si, ella sabe que no es perfecta, que a veces se quiere comer el mundo a bocados enteros sin mesura, que puede ser impaciente, adicta a todo lo que le gusta, que a veces su cabeza entra en diálogos sin fin, en donde se cuestiona todo lo que le rodea... De igual forma sabe que ha cambiado, que es momento de reflexionar hacia dónde va su vida, hacia donde va ella... De pronto le da pena interrumpirlo, aburrirlo, cansarlo... Y así como de pronto piensa en todo eso, le dan unas ganas infinitas de abrazarlo, escucharlo y amarlo sin permiso...

Y cierra los ojos, y siente de nuevo el agua del río de Santa María de los Baños en sus pies, y voltea y esta vez él está ahí, observándola y sonriendo...

Y no pasa nada, ella sabe que en la vida hay desencuentros maravillosos...

4 comentarios:

  1. Me fascina la forma en que pausadamente describís los escenarios hasta lograr que el lector se sinta enmedio del relato. Bien!
    (Olga)

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  2. Aunque al principio me desajustó el entendimiento (;>) al leerlo la segunda vez me gustó mucho esa combinación de certeza y duda, de entrega y reserva.
    Me dejó triste, porque los desencuentros siempre son tristes, por más que sean maravillosos, snif :(

    Muy original.

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  3. HOLA DANIELA, me gusto tu cuento, pero no la resignación que me transmite. Lo más que me ha asombrado es como sales del momento y memoras una sensación que haces palpable en (Y cierra los ojos, y siente de nuevo el agua del río de Santa María de los Baños en sus pies, y voltea y esta vez él está ahí, observándola y sonriendo...) y con la misma vuelves. me gusta.

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  4. Tremendo dilema que se agudiza en ese desencuentro!!!

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