variopinto

variopinto

El simpático hechicero

El simpático hechicero
(Lester Oliveros R.)

El predicador López había tenido una vida como pocos. Aún estando ahí, en ese púlpito, y desde su traje de miles de dólares, contaba cada domingo de cómo había llegado a los pies de Cristo: con las mangas del sweater roto, toda su esperanza muerta en la oscuridad de sus ojos, y los bolsillos del pantalón también rotos como todo lo que llevaba adentro. Contaba esto con un grito de largo aliento, sosteniendo su Biblia Thompson en una mano y en la otra un pañuelo blanco. Muchos hombres, llegaban al altar llorando cada vez que el contaba su testimonio. Iban con las mangas rotas y el cuerpo se les sacudía del llanto incontenible mientras el predicador les ponía su mano en la cabeza y el pecho y les soplaba. Algunos caían inmediatamente. Otros se tambaleaban. Otros apretaban los puños mientras el hombre ese, que antes hablaba de todas las barbaridades que hizo en su vida, les oraba recio casi al oído. Muchos, de las primeras Luego, al no ver reacción, subía al estrado y leía un trozo del Nuevo Testamento. Su mujer, una mujer robusta, como el, buscaba con la mirada a todos los fieles en el momento que pasaba a hablar de la ofrenda, el diezmo y otros pagos por reconstrucciones o ampliaciones del edificio. El predicador oraba desde una silla en los lugares principales, mientras un silencio monástico se apoderaba de todo, y, solo los pasos, suaves, lentos o decididos se oían en toda la eternidad que duraba recibir las ofrendas de casi cuatro mil personas. El predicador, elegante, dueño de si mismo y de un sermón, despliega todo su encanto en las palabras finales. Su mano se levanta y con un solo dedo puede mantener atentas a las cuatro mil almas que sienten que toda su culpa se desvanece cuando el predicador dice la palabra final. José Gutierrez y María Botrán se levantan felices con la idea de ir a la antigua, almorzar y luego pasar a saludar a sus papas. Llevan en brazos a su hija de meses. Muchos van a comer al Campero que queda en el sótano del colosal edificio. Otros se pierden por la calle en buses o carros de cuatro puertas. Una Hummer pasa lentamente con vidrios polarizados. Allí, dentro, con su esposa, sus hijas, yernos y nietos, va el predicador. Cuatro guardaespaldas siguen al milagro más grande de la mañana, el milagro más grande de todos los milagros hechos. La magia que emana del pastor son billetes de a cien para sus nietos junto con su respectiva frase de los Proverbios. También van a almorzar a algún lugar de San Lucas, Tecpan o La Antigua Guatemala. Salen lentamente sorteando a la multitud. En el banco, dentro de la megaiglesia, todavía hay cola por la venta de seminarios, colegiaturas o algún encuentro.

30 comentarios:

  1. No se si el cuento se realice dentro de un ambiente mágico e irreal. En realidad creo que lo que describes pasa más seguido de lo que creemos.
    Claro, mágico porque podríamos catalogar así a lo que sucede allí dentro y por la relación del título con el cuento.
    No me fascinó la verdad, creo que no es tu mejor cuento.

    ResponderEliminar
  2. Duro y directo, Lester, en un tema controversial. Comparto tu punto de vista. En cuando al cuento en sí, bien escrito, muy descriptivo. Muero de curiosidad por ver qué haces con el grupal (POR FAVOR, no le hagás nada a Dixon ¡¡me fascina!! jajaja)

    ResponderEliminar
  3. Sí puedo ver la relación con lo mágico, en muchos casos (no todos, ojo) se manejan "trucos" de histeria colectiva para impresionar...lo que pasa es que este tema religioso es muy personal y subjetivo y al final pues todos tenemos derecho a creer en lo que se nos dé la gana.

    ResponderEliminar
  4. OK, Lester. Me tomé un tiempo más para poder comentar tu cuento y cometí la shutensia de revisarlo un poco más. En esta ocasión te faltó limpiar un poco el cuento. Hay muy buenas ideas y frases impactantes, pero el mayor problema está en redacción y puntuación. Es por eso que muchas veces no se entienden bien los cuentos o cansan desde el inicio. Bueno, agarré tu texto y le fui haciendo los arreglos que yo RECOMENDARÍA, es decir, no pretendo cambiarte tu creatividad, estilo o lo que sea y lo que hago lo hago con el afán de colaborar y hacer la labor de este taller que es ayudarnos mutuamente. Encontrarás unos asteriscos donde hice cambios, ya sea de comas, tildes, orden, palabras. Hay otras partes en donde te puse comentarios entre paréntesis. También dividí en párrafos. Al final del segundo párrafo que creé hay una oración súper rara que se me hace que se te fue sin querer o no se entendió nada. REPITO: Lo que hago no es para cambiarte ni para recriminarte ni para pelear con vos, que he detectado que la gente en este blog ha resultado ser un tanto “sensitiva” y no acepta ni emite crítica, especialmente si es mala. He tratado de ser objetivo ahora y siempre.

    He de comentar, por cierto que lo que yo dividí en un penúltimo párrafo y final, me pareció excelente. Además, he notado tremenda mejoría semana a semana. Y, cuestión de gusto, no lo metí allí, los nombres (Gutiérrez y Botrán) son demasiado específicos y creo que podrías inventarte unos nombres que fueran significativos y que representaran lo que querés decir, pero esto en específico, es cuestión de gusto.

    Saludos.

    ------

    ResponderEliminar
  5. ------

    El predicador López había tenido una vida como pocos. Aún estando ahí, en ese púlpito, y * con su traje de miles de dólares, contaba cada domingo * cómo había llegado a los pies de Cristo: con * las mangas del sweater * y bolsillos del pantalón * rotos como todo lo que llevaba adentro, *y la esperanza muerta en la oscuridad de sus ojos. Contaba esto con un grito de largo aliento, sosteniendo su Biblia Thompson en una mano y en la otra un pañuelo blanco.

    *Muchos hombres, llegaban al altar llorando cada vez que * él contaba su testimonio. Iban con las mangas rotas (*aquí repite la imagen de “mangas rotas” y creo que podrías usar otra ya que no es relevante repetir la expresión para el cuento) y *con el cuerpo *sacudiéndose inconteniblemente *por el llanto, mientras el predicador les ponía su mano en la cabeza y *en el pecho y les soplaba. Algunos caían inmediatamente. Otros se tambaleaban. Otros apretaban los puños mientras el hombre ese, que antes hablaba de todas las barbaridades que hizo en su vida, les oraba recio*, casi al oído. Muchos* de las primeras *filas(?), *al no ver reacción, *subían al estrado y leía un trozo del Nuevo Testamento (*esta oración está rara, no se entiende y no va con el resto, habría qué quitarla o arreglarla).

    *Su *esposa (ya decís “mujer” luego de la coma), una mujer robusta* como *él, buscaba con la mirada a *cada uno (*creo que es más inquisidor que busque a cada uno y no a todos en general, así se da la idea como de acoso) los fieles *mientras subía a hablar acerca de la ofrenda, el diezmo y otros pagos por reconstrucciones o ampliaciones del edificio. El predicador oraba desde una silla en los lugares principales (*en qué lugares principales? Asientos principales? Lugares principales de qué? Habría qué aclarar, lugares es muy genérico y podrías hacer una frase más poderosa diciendo algo de estos lugares), mientras un silencio monástico se apoderaba de todo. *Sólo los pasos, *unos lentos y suaves, * y otros enérgicos y decididos, se oían *durante la eternidad *que demoraba recibir las ofrendas de casi cuatro mil personas.

    (*aquí cambiás de tiempo, recomiendo un cambio de párrafo) El predicador, elegante, dueño de si mismo y de un sermón, despliega todo su encanto en las palabras finales. Su mano se levanta y con un solo dedo puede mantener atentas a las cuatro mil almas que sienten que toda su culpa se desvanece cuando el predicador dice la palabra final. José Gutierrez y María Botrán se levantan felices con la idea de ir a la *Antigua, almorzar y luego pasar a saludar a sus *papás. Llevan en brazos a su hija de meses. *Otros (primero te fuiste específico, con nombres, así que creo que aquí va más “varios” y no “muchos”, lo cual hubiera sido diferente si no hubieras puesto nombres primero sino “unos” entonces sí siento que iría más) *van a comer al Campero que queda en el sótano del colosal edificio. *Varios se pierden por la calle en buses o carros de cuatro puertas. Una Hummer pasa lentamente con vidrios polarizados. *Dentro, con su esposa, hijas, yernos y nietos, va el predicador. Cuatro guardaespaldas siguen al milagro más grande de la mañana. El milagro más grande de todos los milagros hechos. La magia *en billetes de a cien *con su respectiva frase de los Proverbios.

    También van a almorzar a algún lugar de San Lucas o Tecpán. Salen lentamente sorteando a la multitud. En el banco, dentro de la megaiglesia, todavía hay cola por la venta de seminarios, colegiaturas o algún encuentro.

    ResponderEliminar
  6. ¡Que buen comentario/crítica Quique! es muy constructivo y se agradece y sí, algunos son/somos poco receptivos a veces.

    ResponderEliminar
  7. Manu: Ninguno es tan bueno. Hace poco tuve una conversaciòn con un amigo, y le contaba que lo único que publico en blogs son mis ejercicios, nunca algo acabado. Este particularmente no lo pude desarroyar,PERO la magia que hay en estos sitios supera la ficción.
    Olga: como bien dice Martínez, se me fue un texto de más, ahi coladito, pero gracias, en realidad necesita resumirse este relato. No es un cuento, si alguien versado, un escritor extrajero o nacional, pero de los buenos y honestos, viera que le llamamos cuentos a simples relatos escuetos, podria corregirnos un poco el atrevimiento...jajaja, pero en fin. Ya envie el texto, espero sirva el giro, pero no es mi estilo esos mamotretos entre todos, como juego para generar reciprocidades podria ser fatal, saludos.
    Olga 2: El tema es religioso, pero Cash Luna también tiene sentido del humor...jejeje
    Quique, veo que el cuento te queda mejor a vos, asi que te lo regalo, reproducilo, todavia le falta. Y sobre las comas, depende de como se lea, nuestros tonos y pausas son tan disimiles, eso es algo que esta sobre la mesa siempre en las discusiones de la RAE. Saludos y que honor que te tomaras el tiempo. Colgue arriba como me parece debiera ser con sus pausas. y SI se me pasaron unas palabras de más. Hasta luego.

    ResponderEliminar
  8. En realidad repito que no quise adueñarme de tu cuento, perdón si lo presenté de esa manera. En realidad creo que la dinámica de este y otros talleres es recibir y dar opiniones, lo que te parece lo aceptás, lo que no lo agradecés y callás, porque al final son eso: opiniones, y cada quién escribe distinto, esa es la gracia. Yo SÍ creo que todos acá podemos dar opinión de estos cuentos, que SÍ son cuentos (o bueno, en su mayoría) y que no necesitamos a alguien muy famoso, porque a final de cuentas la fama no hace la capacidad de la persona. Estoy seguro de que si alguien pone, como ejercicio, un cuento de alguién grande acá, todos lo podríamos corregir y dar opinión, al final de eso se trata el arte, de expresar, causar impacto, crear discusión, cambiar comportamientos, invitar a la reflexión, inspirar, hacer soñar. A final de cuentas uno puede escribir un cuento que no se entienda nada de nada, que si ese es tu propósito pues está bien, te expresaste, pero igual si está en un medio público va a tener crítica. Y creo también que la idea de ejercicio, todos la tenemos y sabemos que todos estamos escribiendo ejercicios. En qué momento dejan de ser ejercicios? Eso lo sabrá cada quien. Yo, por mi parte, aprendo mucho de la crítica, sobre todo de la que me desgarra los textos. A veces cambio algo, a veces no. A veces lo tomo para la próxima, a veces no. Sobre escucho, porque si quiero comunicar algo y según yo está ya terminado, no me meto a un blog/taller, sino que lo publico en el mío o saco un libro. Y creo que tus "ejercicios" son buenos y dejan de ser "ejercicios" cuando vos lo decidás. Y todos acá estamos para aprender técnica, porque la imaginación ya la tenemos. La técnica es precisamente la redacción, la puntuación, cómo comunicar, licencias, etc etc etc. Y esto que escribo no es un sermón, sino que me piqué escribiendo como que estuviera hablando en una lectura, así que acá lo dejo. Abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Considero que cualquier crítica, siempre y cuando sea constructiva se debe de tomar en consideración. Yo en lo personal le pongo mucha atención a las que me hace Quique, pues quiera que no, tiene más experiencia que yo, y a veces no me gustan, pero las escucho y tomo lo positivo, más a sabiendas que el es de los fundadores de este blog.
    Saludos a todos

    ResponderEliminar
  10. Mire Quique, hace no mucho un joven que se hace llamar Juan Pensamiento me comunicó que un cuento mio no tenía coherencia, le pregunte si el creía que los sueños tienen coherencia y no supo que responderme. Le puse el ejemplo de Kafka y me di cuenta que no había leído el libro. Estos comentarios, tanto el tuyo ( y lo digo con amigabilidad...jajaj) y el del amigo Juan Pensamiento, son desde un estrado, y se hacen oir como sabelotodos, como grandes oradores, en otras palabras el cuento pasa a ser un pretexto para corregir y sortear el destino de los otros cuentos, y no con una visión compasiva, tolerante, viendo siempre que la mayoria de los buenos escritores de acá son gente mayor, que utiliza la ficción como todos, como catarsis y renovacion de recuerdos. saludos.

    ResponderEliminar
  11. Lester, en realidad yo soy la persona más humilde que hay en el mundo. No pretendo ser un sabelotodo, no lo soy, ASÍ SON TODOS LOS TALLERES. El punto del taller no es decir "qué bonito" sino crecer, si no estás equivocado de blog. Te digo, este ejercicio lo empezamos tres personas hace casi 20 años, con el fin de forzarnos a crear y de mejorar nuestros textos. Luego surgió Lunesadas y ahora Martesadas con mucha gente nueva, lo cual para mí es extremadamente útil porque me nutro de lo que los demás dicen. Te repito, no tengo intención de hacerte sentir mal y no me las estoy llevando de nada, sino de que espero compartir con todos opiniones para mejorar cada día. Si vos no creés que lo tuyo es un buen texto o que yo estoy por encima de vos o de alguien más, tenés problemas de autoestima, porque acá se han escrito cosas geniales y, por sobre todo, la creación de uno no puede compararse con la de otro. Lo de "gente mayor" ahí dejo que los demás te respondan. Yo soy "mayor" desde hace tiempo. Te digo, tus comentarios tienen bastante fuerza, y eso es lo que me gustaría ver en todos tus cuentos, porque en realidad me causan nervios, ansiedad, me cuestionan, así tenés qué escribir. Y sí, he leído a Kafka y no dudo que Juan lo haya hecho también. Eso es programa del colegio. Y sí, a mi opinión es coherente.

    ResponderEliminar
  12. Estimados, les encargo mucho que TODOS los comentarios sean constructivos, hechos y tomados con MADUREZ. Si alguien va a desacreditar a otro o "amablemente" insultar o sacar de contexto algo, sepan que mi función es MODERAR, eso incluye eliminar los comentarios fuera de lugar o tono. Nunca se ha hecho pero no quiere decir que nunca se tenga que hacer.

    ResponderEliminar
  13. Para terminar, y dejar algo realmente valioso en este post, les diré que no se puede jugar a ser CRITICO Y CREADOR, créanme que descreo de cualquier critico, yo mismo creo que la única crítica que valoro es de alguna forma una borrosa latencia de liberabilidad, de pornografía mental, de excesos sedimentarios que van formado algo tangible únicamente con la memoria y la recreación de algo hecho ya muchas veces, porque hasta ahora no hay nada original. Si alguien quiere crear algo solido y que en verdad trascienda, puede olvidarse de la critica, ahora, como aquel amigo de Hemingway que era muy malo para escribir: puede dedicarse a ser critico. Por otro lado, las sugerencias sabias, originales y puras, son bienvenidas. Saludos.

    ResponderEliminar
  14. Veinte años es mucho tiempo. Felicitaciones.

    ResponderEliminar
  15. Oigan amigos, que esto no se malinterprete, yo digo disparates todo el tiempo (así me gano la vida...jajaja), pueden criticarme, pueden cambiarme un cuento, pueden darle vuelta y poner el principio al final y el final al principio, pueden sugerirme nombres de personajes, pueden meterse con mi debíl gramatica, ortografia y redacción, pueden decirme que esta malo, malisimo, pueden aconsejarme sanamente que deje de escribir, es en serio, pueden tambien sugerirme locaciones, lugares paradisiacos, intimos rescoldos frente a una chimenea, zonas afrodisiacas del cuerpo, puros santuarios para la purificación del alma, siempre es necesaria una sugerencia, un consejo y hasta la mala critica esa que desde ya huele a envidia, hasta esa vale la pena. Saludos, estoy leyendo los demás cuentos, por fin tengo algo de tiempo.

    ResponderEliminar
  16. De ninguna manera, a mí me encanta la discusión. En serio quiero que quede claro, no solo en este caso sin en todos los cuentos, cuando opino no es porque yo cre que soy la autoridad, QUE NO LO SOY, o que soy escritor consumado, QUE ESPERO NUNCA SERLO. Y si alguien cree que alguna vez no soy objetivo (si no lo soy trato de aclarar siempre que es gusto o cuestión personal) por favor me lo dice.

    ResponderEliminar
  17. Lester: Yo no me hago llamar Juan Pensamiento: es mi nombre real. Y claro que he leído La Metamorfósis...ni siquiera la discutimos como para que salieras con que te pareció que no la leí; igual, no me importa. Lo que sí pienso hacer, es que todo lo relacionado con Martesadas se discuta en estos foros y no que te pongás pasivo-agresivo en facebook, como hiciste el viernes. Es muy simple, en realidad: el ejercicio de las Martesadas incluye el espacio para la crítica como componente esencial y si a alguien no le gusta, pues que no participe y ya...y si participa, se debe aguantar incluso las críticas más vacías o tontas que puedan venir de quien puedan venir y si quiere las rebate y si no quiere, pues no. Por mi parte, dejo de leer tus cuentos desde ya, para evitar incomodidades pueriles, de las que no tengo necesidad. Por cierto, desarrollar se escribe con Ll y no con Y. Y yo tampoco me creo el sabelotodo y soy humilde, aunque no siento necesidad de explicarlo ni de reiterarlo, me basta con hacer mis críticas precisamente con sentido crítico y convicción y no con superioridad; objetivas no pueden serlo por la propia naturaleza de una crítica, pero la objetividad sí es un elemento que se busca. Cada quién, pan para su matate. Yo también soy fan de la discusión horizontal y abierta, pero no es eso lo que pasó el viernes ni es eso lo que pasó hoy.

    ResponderEliminar
  18. Y Manu, con todo el respeto y la felicitación que constantemente te doy por el buen manejo que le das al blog, la cual agradezco, de verdad no creo que tu función sea mediar en las discusiones ni decidir qué es y qué no es fuera de lugar. Aquí todos somos adultos responsables y no deberíamos tenerle miedo ni a la crítica ni a lo que pueda parecer un conflicto. Un gran problema cultural de los guatemaltecos es nuestro miedo a opinar para no causar conflicto.

    ResponderEliminar
  19. Si este foro comienza a tener censura, definitivamente me retiro, aunque no le importe a nadie.

    ResponderEliminar
  20. Es ya compartido por todos, los grandes beneficios de un blog, entre otras cosas por el efecto "Koji kabuto", es decir, el gran aparato Mazinger Z, que puede ser manejado desde una computadora, tranquilamente con toda la asepsia del mundo protestar y decir lo que sea contra el mundo o un solo ser humano. No te molestes, la crítica también le llega a los grandes profesionales de la discusión. No te preocupes que yo si voy a ver tus historias, por cierto, no todo es malo viejo, ese personaje de Dixon cautivo a Olga y parece un arquetipo bastante común pero tiene sus habilidades y recursos para extenderse, bravo. Por otro lado, yo no tengo tantos prejuicios, menos con las putas, en realidad me agradan mucho.
    Deberías de actuar con más madurez, porque sé, estoy seguro, que lo primero que vas a hacer los martes por la mañana es ver todos los cuentos publicados. Como te dije en esa conversación sos bueno para criticar, tenes madera, ese no sé qué que causa consternación en las mentes neófitas, y eso es un talento. Yo te aconsejo que no te vayas, acá se necesita de un personaje con tal arrojo y conocimientos formales. Anímese Juan. Voy a ver su cuento ahora mismo, no lo tome todo tan a pecho.

    (Por cierto, jilguero se escribe con j aunque generalmente siempre se escribe con g.. jejeje)

    ResponderEliminar
  21. Creo que a todos los que crean les es muy difícil aceptar la crítica ya que lo creado es algo muy propio. Sin embargo es un mal necesario. Aún los escritores más importantes tienen "lectores" que corrigen la redacción y la ortografía antes de publicarlos.
    Ahora bien, este blog es precisamente pensado para el intercambio de opiniones. Lo cual puede ser enriquecedor, porque muy pocas veces tienes esa reciprocidad de los lectores de una forma tan rápida. Así uno ve si se está transmitiendo lo que quiere decir o no. Y es interesante saber qué ven otras personas en lo que uno escribe.

    Creo que todos aquí tomamos en serio el blog, y esperamos que los demás también lo tomen así. Muchos ya tienen una base sólida en la escritura, pero lo bonito es que nos respetan a los infieris. Así que "Paz hermanos lobos". Y yo también leí a Kafka, Brecht, Goethe, etc.

    ResponderEliminar
  22. Muy bien dicho Ixmucané. Pienso lo mismo, una de las características más necesarias en este tiempo y país es la tolerancia que va de la mano con la aceptación. A veces me gustan los cuentos de Juan y a veces no. A veces entiendo los de Quique y a veces no. Hay unos de Lester mejor escritos que otros. Yo, en lo personal, me limito a decir si me gustó o no, nada más y no me animo a extender mi crítica porque no soy experta en ninguna de las áreas necesarias. LLevo 10 cuentos y 10 semanas de "escribir" por lo que para mí las críticas constructivas son útiles, necesarias y bienvenidas. Yo estudio y consulto antes(siempre he sido nerda) y cuando me siento a escribir me emociono hasta las lágrimas a veces. Así de serio he tomado este blog y lo primero que hago los martes -en efecto- es leer los cuentos y ya sé que cada quien tiene su estilo, veo la mejoría entre los más nuevos y conocemos ya más de algo de los integrantes: todo a través de una pantalla. No se trata, creo yo, de quién haya leído más autores. La vida y las experiencias son la mejor inspiración para cualquiera. Yo he tenido el privilegio de una educación excelente desde niña y ahora cuento (a la fuerza) con el tiempo para poder dedicarme a esto, pero hay otros que no han tenido esa suerte y escriben después de un largo día de problemas y trabajo, cansados físicamente, pero lo hacen porque les/nos sirve de catarsis. Todo esto tendríamos que tomar en cuenta a la hora de criticar un trabajo. Lo peor y lo mejor que le ha pasado a la comunicación son las computadoras: no podemos ni interpretar ni dar a entender el 100% del mensaje. Todo está en el "tono" con que se diga y como no hay "voicemail" pues tal vez por eso se ha dado tanto malentendido. Que ya pare esta controversia.

    ResponderEliminar
  23. SALUDOS A TODAS LAS CONTROVERSIAS DEL MUNDO
    SALUDOS A LOS ERRORES GRAMATICALES
    SALUDOS A LAS FRASES SIN SENTIDO
    SALUDOS A LOS DESPOTAS DETRAS DE TODOS LOS ESPEJOS
    SALUDOS A LOS QUE SE PROYECTAN Y REFLEJAN
    SALUDOS A LOS LIDERES DE LA EQUIVOCACION
    SALUDOS A LOS FALSOS PROFETAS Y A LAS REINAS DE LA BELLEZA
    SALUDOS A LOS TEXTOS RADICALES Y LOS SEÑALAN CON EL DEDO
    SALUDOS A LA LLAGA Y AL DESVELO
    SALUDOS A LOS ESPIAS Y A LOS QUE ESTAN DESNUDOS
    SALUDOS.

    ResponderEliminar
  24. Quique. Estaba. revisando el texto que corregiste:

    *Muchos hombres, llegaban al altar llorando cada vez que * él contaba su testimonio. Iban con las mangas rotas (*aquí repite la imagen de “mangas rotas” y creo que podrías usar otra ya que no es relevante repetir la expresión para el cuento)

    *** No tengo que explicarlo, porque es uno de mis trucos para escribir. Pero dado que aca hacen talleres para escribir, pienso que a alguien le interesara saber lo siguiente.

    Decalogo de Lester para la Escritura.

    1- La repeticion de palabras.
    2- Nada tiene sentido y todo tiene sentido.
    3- Hay que contar el verdadero cuento de cuando el hombre pica a la Cobra y no al revez como lo hacen los fariseos.
    4- No mirar a nadie.
    5- Ver mucha televisión.
    6- Jugar disciplinadamente el deporte de la risa.
    7- Creer en todo y en nada.
    8- Ser fiel a algo, aunque sea a un lapicero.
    9- Cuidarse las manos no es bueno, escribes mejor si te muerdes las uñas hasta arrancarte la piel y ves sangre.
    10- Amar algo aunque sea un nombre falso.

    ResponderEliminar
  25. Ahora si:
    *Muchos hombres, llegaban al altar llorando cada vez que * él contaba su testimonio. Iban con las mangas rotas (*aquí repite la imagen de “mangas rotas” y creo que podrías usar otra ya que no es relevante repetir la expresión para el cuento)

    *** Me da mucha pena pero tengo que explicar que lo que escribo esta cifrado bajo codigos, no es axidental que llo escriba dos beces una palabhra. La mangas rotas, son un simbolo, de que todos los que llegan asta el pulpito, podrian repetir la historia del predicador.
    }

    ResponderEliminar
  26. A ver patojos, esto es muy fácil, el blog se está pudriendo poco a poco. Por más que me duela, les digo, que en Lunesadas, que era un blog solo de amigos, todo fluía muy bien y cada quien aceptaba lo que le comentaban o lo que le refutaban. Ya esto parece un pleito de mercado, y no creo que ese sea el propósito. Si alguien se quiere ir, hágalo, como yo, sin decir que si alguien los extrañará o no, o que si te leen entre líneas o no, o que si eres un precioso currucucú te amo y que por eso escribes bien. Esto es un ejercicio, no un blog entre parejas para decirnos nuestras vivencias y comentárnoslas o enojarnos. No se maltraten entre líneas. Ya pasó. Ya po pom, como diría mi sobrina, y por favor dejen de hacer comentarios como: "Este es tu mejor cuento mi amor, que lindo", hagan comentarios como los de Ixmucané, los de Fabiola, los de Quique, comentarios que sí tienen peso y base,o refuten como Lester, con propiedad. Les aconsejo que lean los comentarios de Lunesadas, donde no todo era lindo, y cuando uno contestaba, se agradecía.
    Por mi parte, seguiré leyendo los cuentos, me encantan, pero no formaré parte de un tirin tiran.
    Saludos cordiales a todos.

    ResponderEliminar
  27. Señores, apelo a la Madurez que estoy seguro hay en cada uno.

    Que un blog esté vivo o muerto depende de cada uno y la suma de todos. A mi punto de vista el blog está "vivito y coleando" y estoy seguro que en cada uno despierta una fibra emocional que le hace escribir comentarios a veces con bilis, a veces con una sonrisa en los labios, a veces con amor expresado, incluso, con una lágrima.

    El enemigo no son los diferentes puntos de vista y opiniones, el enemigo es la indiferencia. Aquí puede haber de todo menos indiferencia. Este paciente tiene un corazón de quinceañero.

    Estimadísimos. Sigamos. El tema para el Martes siguiente son Cuentos que inician por el final, está interesante. Aparte estamos a punto de terminar el primer cuento grupal y ya tengo muchas ganas de abrir el espacio para comentarlo y ver los suyos.

    ResponderEliminar