variopinto

variopinto

La procesión de la clase media

La procesión de la clase media
(Por Gerardo Gálvez)

Kilometro dieciséis y medio Carretera a El Salvador, lunes a las seis y media de la mañana.
Maneja un Volvo del año del caldo sumergido en el tráfico lento de la mañana…Todos van a su trabajo de los suburbios a la ciudad capital. Se vuelven espectadores, testigos presenciales de las historias y dramas matutinos.

Atrás de él viene el Mercedes Benz gris, manejado por el mismo de la camisa bien planchada, de verde menta, de corbata impecable color café degradado que hace un juego perfecto con su look de ejecutivo de primera y con su celular de última generación tomado firmemente de la mano izquierda, va dando órdenes e instrucciones: eso se intuye por la gesticulación de seguridad que muestra al hablar.

Delante va la misma del escarabajo Volkswagen con la chavita del pelo recogido y anteojos intelectuales que se encuentra concentrada en la trasmisión mecánica y en el traca traca del motor trasero. Siempre llega a tiempo a su cátedra a la universidad.

Al lado del tipo del Volvo siempre la gordita del Toyota Yaris cantando a todo pulmón algo de Ricardo Arjona, siempre canta a toda fuerza “Mujeres”, es Secretaria Recepcionista obligada a abrir la oficina y comer su primer muffin después de desactivar la alarma y encender las computadoras.

De repente se le pone enfrente una camioneta de “Rutas Josefinas” con su nudo de albañiles, guardianes, sirvientas con sus rostros serios ante la incertidumbre de llegar a encontrar sus trabajos nuevamente.

En el lado derecho del trafico, y en la gasolinera, se puede apreciar la Suburban, la Hyundai Santa Fe y la Kia Sorrento de los mismos: dos madres de estampita dejando a sus hijos en el bus, platicando con el tipo de siempre, papá ejemplar que de reojo le mira siempre las nalgas a la mas chaparra de las mamás suburbanas.

Por el retrovisor advierte la doble cabina del Toyota High Lux de la Policía, custodiando el vehículo celda que lleva a otro ex presidente o ex funcionario a declarar a tribunales para rendir cuentas de sus hueveos.

En el carril contrario la ambulancia de Alerta Medica con la sirena y las luces dando vueltas: otro que se le subió la presión, le dio dolor de pecho, o simplemente se resbaló de su baño al ducharse: los tres ya tienen miedo de no asistir a su trabajo, porque por lo que ganan, sus patronos pueden conseguir tres más jóvenes y menos quebradizos que trabajarán con mas horas y más atención.
El Hummer color amarillo huevo de siempre, con su mismo tripulante con la cabeza rapada y los hijos de aquel narco sentados atrás; que hoy tiene que entregar dos millones de dólares en billetes de a veinte en el centro de restaurantes de comida rápida en “Pradera Concepción” a las once…

La de la Fiat Palio color blanco que tiene en la parte de atrás aquella calcomanía del Rosario que está de moda y que ya va tarde a la misa de siete de la mañana a encontrarse otra vez con aquel feligrés casado y del “Opus Dei” que ya la rozó con sus besos, después de la Santa Comunión.
El joven del Subaru Impreza que encamina a su novia de hace seis meses y que a cambio le permiten, durante el tráfico, meterle la mano dentro de la falda y tocarle su sexo, se pasa de listo y rebasa a todos.

La pareja de esposos sexagenarios del Mazda deteriorado que siempre van en silencio y viendo para adelante, van pensando que no tienen edad de seguir pagando las cuentas, las matriculas y el apartamento del hijo único que vive en Estados Unidos con su carrera de “Bachellor In Business”.

Todos van en silencio, sin bocinar, como ovejas al matadero…

8 comentarios:

  1. Creo que cumple muy bien lo de omnipresente. Sin duda es un mal necesario que se vive diariamente. Varios de los personajes seguro que son reales, es decir, el Impreza y el Hummer amarillo son reales no? Son como los personajes que encuentras en la Antigua, nadie les ha hablado pero todos los conocen por excéntricos o por algo.

    ResponderEliminar
  2. Me encanta, me gusta como comparas cada carro con su dueño ¡Muy bien hecho!

    ResponderEliminar
  3. Perdón, lo de las mamás dejando a sus niños en el bus con el "papá ejemplar" chequeando a las mama (ita) s. Fotografía diaria.

    ResponderEliminar
  4. Es una descripción muy interesante y muy buena para empezar algo, pero creo que sólo describirste y nos serviste el entremés y se te olvidó el plato fuerte porque no vi historia. Me recordó en demasía a "La Autopista del Sur" de Cortázar. Sin embargo, si no has leído ese cuento tenés chance de leerla, date cuenta cómo él aparte de describir los carros y sus personalidades se va un poco más allá y hace que suceda una historia. aquí va el link: http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/cortazar/autopist.htm

    ResponderEliminar
  5. Este me gusto, independientemente que tenga cierto parecido con otros. Pero este es una estampa inmovil, como una fotografía. Y si es completamente ommmmmmmmmmmmmmmmmm. Saludos.

    ResponderEliminar
  6. la última línea me hizo recordar el video aquél de REM, Everybody hurts...

    ResponderEliminar
  7. REM "AUTOMATIC FROM THE PEOPLE" EL MEJOR DISCO DE ESE GRUPO, EVERYBODY HURTS, LA MEJOR CANCION, NO PASO UN MES SIN ESCUCHARLA...DISTE JUAN EN EL CLAVO. SIEMPRE DAS.

    ResponderEliminar