variopinto

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El Chat

EL CHAT


Por Gerardo Galvez



Se encendió la pantalla:

“Windows esta iniciando” marcaba en ese letrero de colores e intermitente.

-Click, Enter, contraseña-

Ella estaba conectada en el chat…

No la conocía, no sabia como físicamente era , no tenia ni la menor idea de su vida, de su pasado, de sus momentos. La agregó a la lista de sus amigos, y comenzó a tener “Chats” inocentes con ella, semanas atrás, conversaron de sus vidas, sus rutinas, sus sueños truncados, y la conversación se tornó más íntima, mientras esta avanzaba cada noche.

-Hola Vicky, Como estas? –Tecleo, espero en la parte inferior de la pantalla, “Vicky está escribiendo un mensaje”

-Bien, y tu?- Respuesta entrecortada que recibió.

Se atrevió a preguntarle lo que no lo había dejado dormir:

-Que color de ropa interior traes puesta?- tecleó rápidamente.

Respuesta en intervalo de tres minutos que parecieron una eternidad... El sintió cómo el muro del Pecado, de la Transgresión, de Lo Prohibido se le había derribado: Tocó su anillo de matrimonio como si le estorbase el dedo.

-Negro- Le contestó en forma breve.

Ella no le derribó, sino le abrió la puerta de ese Jardin en donde se podría transgredir el mandamiento de no desear mujer ajena: Siguieron la platica en un tono más íntimo, audaz, atrevido. El chat se concentro entonces en los pezones de ella, en la pelambre de su pubis, en el tamaño de sus piernas, en la suavidad de su piel. El, saboreaba eróticamente el momento, le escribia rápidamente: Total: Estaba en la soledad de su oficina, había terminado de trabajar, y ahora se iba a dar el gusto.

Y ella le preguntaba sobre las dimensiones de su masculinidad, se imaginaba la humedad de su lengua que le recorría el cuerpo con una pasión desesperada, ella esperaba las respuestas como descargas eléctricas que recibia en su computadora , sus hijos estaban en la sala, su esposo no había regresado del trabajo.

-Total- Pensaba- Esto no es fornicación, es chat- Y tranquilizaba asi a su martirizada conciencia mientras esperaba la respuesta del otro lado de la pantalla.

El se había quitado los pantalones y cerrado los ojos y con una mano escribia en el teclado, mientras la otra hacia lo suyo…auto complaciéndose.

Lo que estaba sucediendo era totalmente irónico, descabellado, patético pero a la vez se olvidaba de su posición de esposo y de padre: Se abandonaba totalmente a un tipo de infidelidad cibernética que no conocía, en donde nadie salía herido.

Llegaron al climax los dos…

Se escribieron sobre su vivencia , su encuentro desconocido que los había empujado a tal locura.

  • Por Dios, Enrique, si somos casados y mi esposo es muy bueno conmigo =(-Escribió con la simbología del Internet. Ella trataba de regresar a su mundo, de aferrarse desesperadamente a sus lineamientos, sus educaciones, sus reglas de moral y buen comportamiento. El solamente pensaba en terminar la platica, eran las ocho de la noche y esposa e e hijos lo esperaban para cenar.

Se desconectaron de la conversación y cada uno de ellos volvió a su vida…

CLICK. INICIO, APAGAR…


4 comentarios:

  1. De este cuento en particular, me voy a abstener de comentar...sólo digo que hay que seguir revisando puntuación.

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  2. Me gustó mucho. Creo que no estaré solo si digo que hemos tenido en algún momento esa tentación... Muy bueno.

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  3. Me gustó mucho la idea del sexo por chat. Lo que no me gustó mucho es el juicio calificador que hace el narrador. Me gustaría más un narrador más objetivo, para que el cuento sea menos moralista y deje al lector decidir si es bueno o malo. Por elemplo en lugar de "Lo que estaba sucediendo era totalmente irónico, descabellado, patético", "si bien él pensaba que lo que estaba sucediendo era irónico, descabellado y patético".
    Pero sí, me encantó el cuento en lenguaje chat.

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  4. me hubiese gustado que el final fuese distinto algo como no se conocian pero en realidad eran esposos jajaja
    greisi :)

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